Hola.
Hoy voy a hablaros de la realidad como etapa de un proceso de coaching.
En esta etapa del proceso nos ocupamos de la percepción que vosotros tenéis sobre vosotros mismos y la confrontamos con la visión que de vosotros tiene vuestro entorno.
Esto es especialmente útil cuando estamos trabajando en procesos de coaching Ejecutivo y queremos saber cuál es la visión de vuestro entorno (compañeros, clientes, proveedores, …) sobre aspectos concretos de vuestra forma de trabajar o de vuestra forma de relacionaros con los demás.
También en coaching personal cuando estamos analizando vuestra situación personal frente a vuestro entorno (familiar, pareja, amigos,…).
En ambos casos se está incluyendo a terceras personas y se les está pidiendo opiniones.
Aquí no hay verdades absolutas sino distintas percepciones sobre una misma realidad. Son el conjunto de estas percepciones, confrontándolas a las vuestras propias, las que nos proporcionan una imagen, a partir de la cual podemos trabajar.
La diferencia que en muchas ocasiones se producen entre vuestra propia percepción y la de la que tienen los demás os dará mucha información sobre la realidad de vuestro punto de partida.
Este es sólo uno de los modos en los que podemos trabajar en esta etapa.
Estamos tratando de determinar cuál es la situación lo más real posible de vuestro punto de partida al iniciarse el proceso, siendo también aplicable a cualquiera de las situaciones concretas sobre las que queráis trabajar que vayan surgiendo durante las sesiones.
Puede bastar con poner encima de la mesa los distintos aspectos relevantes sobre los que se quiere trabajar en relación a un asunto, para que mediante otro tipo de dinámicas determinéis dónde estáis en relación a ese asunto usando únicamente vuestra perspectiva, y desde ahí ver en qué dirección está el objetivo.
En nuevos posts hablaremos de distintas técnicas que se pueden utilizar para acercarnos a esa realidad de la que partís.